Cuando entramos a vivir a una nueva vivienda lo que buscamos es que se convierta en nuestro hogar. Un lugar donde pasar tiempo de calidad en familia o con amigos. Sin embargo, en ocasiones, hay indicios de que esa casa en la que vives no te agrada al 100% y necesita un cambio.
Y ese cambio puede ser una reforma, integral o parcial, que haga que de verdad se convierta en nuestro hogar. Cuidando y mimando todos los detalles para lograrlo. Sin necesidad de cambiar de vivienda, simplemente realizando cambios en su interior.
Pero, ¿cuáles son esas señales que nos dicen que necesitamos un cambio?
A continuación, vamos a explicar algunas señales que nos indican que realmente necesitamos una reforma y no un cambio de vivienda.
- La zona en la que vives te agrada. En su momento elegiste ese barrio por algo y no necesitas mudarte ni cambiarte a otra parte.
- La casa te convence. Puede que su distribución o algunos espacios quieras cambiarlos, pero el resto de sus características, garaje, terraza, zonas comunes, etc. cumple con tus necesidades y gustos.
- Los servicios que rodean la casa también son perfectos para ti.
Además de estos puntos, si esa vivienda tiene unas dimensiones adecuadas para las personas que vivís, deberás empezar a pensar más en la reforma. Será una inversión que merecerá la pena para conseguir el hogar deseado.
Por otro lado, también hay algunas señales que te indican que tu casa necesita una reforma. Y son las siguientes:
- Años de la vivienda: el paso del tiempo hace que ciertos materiales se vayan deteriorando. Además, la normativa y los estándares de calidad van cambiando y puede que esa vivienda necesite renovar ciertas instalaciones.
- ¿Averías recurrentes? Invertir dinero en continuas averías, aunque sean pequeñas, es otra señal de que tal vez debas invertirlo en una reforma más grande.
- Gasto en calefacción: si las facturas y gastos generales de calefacción o aire acondicionado se disparan cada mes con respecto a las de tus vecinos o conocidos, puede que tu vivienda no tenga un buen sistema de aislamiento y tanto el calor como el frío se estén escapando.
- Ruidos: escuchas las pisadas de los vecinos, el ruido del ascensor o los gritos de los niños… Un signo más para mejorar el aislamiento de la vivienda y conseguir un confort acústico.
- Cambio de necesidades: los años van pasando y las necesidades de cada familia también varían. No es lo mismo una casa donde hay niños, que una vivienda donde viven dos personas recién jubiladas y sin hijos en casa.
- Cocina y baño: dos espacios antiguos y oscuros en los que conseguir, gracias a la reforma, unas estancias cálidas, prácticas y adaptadas a tus necesidades.
Y podríamos seguir enumerando más señales que indican claramente que lo que de verdad necesitas es una reforma integral que haga que tu vivienda se convierta en tu nuevo hogar. Pero con la lista anterior, seguro que es suficiente para convencerte.
En Eune Interiorismo realizamos reformas integrales y parciales según las necesidades de cada cliente y buscamos siempre cumplir con lo que buscan. ¿Estás pensando en reformar tu vivienda?
Contacta con nosotros y cuéntanos cómo te gustaría que fuese tu hogar. ¡Estamos encantados de ayudarte!