Cuando hablamos de interiorismo y de decoración son muchas las veces en las que nos confundimos de profesión. Es cierto que, en ocasiones, pueden trabajar de manera conjunta, pero su labor es totalmente diferente. A continuación vamos a explicar el trabajo que desempeña cada uno de ellos en el día a día:
Un interiorista es aquella persona encargada de la realización de reformas integrales o parciales, es decir, modifica y distribuye un espacio cambiando su imagen por completo. También trabaja en la eliminación de paredes, cambio de instalaciones, elección de nuevos materiales… En definitiva, crea un nuevo espacio, normalmente, partiendo desde cero.
El decorador, como su nombre indica, se centra en el diseño y la decoración de un espacio y busca los elementos necesarios para conseguir ese cambio. Sin embargo, un cambio de decoración no tiene por qué requerir una reforma integral. Simplemente se puede modificar ciertos elementos de la vivienda o local comercial con el fin de cambiar el estilo del espacio o renovarlo.
Como hemos podido observar, son dos conceptos que están muy ligados y que pueden traer confusiones. La diferencia clave para distinguirlos es que el trabajo del interiorista se enfoca más en cambiar la estructura y la imagen de un espacio, mientras que la labor de un decorador se centra en la parte decorativa.
En EUNE Interiorismo somos especialistas en interiorismo y llevamos años realizando proyectos en viviendas, locales comerciales y oficinas. Siempre nos ajustamos a las necesidades de nuestros clientes y sacamos el máximo partido al presupuesto con el que contamos. Realizamos todo tipo de reformas integrales y te garantizamos el mejor resultado. ¿Quieres contar con nosotros para tu próxima reforma?