El espacio destinado a baño cada vez está teniendo más importancia en la reforma, estudiando cada rincón de esté, dando gran importancia a la iluminación que se incorpora.
Sin embargo, elegir el tipo de luz para este espacio no es tan sencillo. Escoger una u otra depende de diferentes factores como el tamaño del baño, el estilo de este o la iluminación natural que tenga.
¿Luz general o luz puntual?
Por eso, es aconsejable empezar con una iluminación general que parta del techo. En este caso, la mejor opción es instalar iluminación empotrada y si además son orientables, mejor. Pero, también es recomendable introducir luz puntual. Es decir, iluminar zonas concretas como el lavabo, la ducha o la bañera.
Estas zonas pueden iluminarse con diferentes tipos de luminarias, bien aplique sobre o entorno al espejo o bien que esté, este retroiluminado, consiguiendo de esta forma una luz más indirecta. Y un punto positivo de esta iluminación extra, es que pueden contar con un encendido más, para no tener todos los puntos de luz encendidos creando diferentes ambientes.
Por otro lado, iluminar la zona de la bañera o la ducha depende mucho del tamaño del baño. En espacios grandes se puede optar por una iluminación específica que se centre únicamente en esta zona. Sin embargo, en baños pequeños, con la iluminación general, seguramente será suficiente.
Luz natural
Contar con iluminación natural en un baño es una gran ventaja. Sentir y ver la luz natural es mucho más agradable y, desde el punto de vista práctico, nos ahorraríamos el encendido artificial durante las horas de sol.
Aunque puede parecer que una ventana resta privacidad al estar ubicada en el cuarto de baño, lo cierto es que hay tipos de cristales que nos permiten recibir la luz sin ser vistos y siempre tendríamos la posibilidad de colocar un estor.
La temperatura de la luz, ¿cuál es mejor: fría, neutra o cálida?
Otra de las dudas más frecuentes a la hora de elegir la iluminación del baño es si optamos por una fría, neutra o una cálida. La realidad es que lo más adecuado para que un baño nos invite a la relajación y al confort cuando accedemos a él es decantarnos por una luz cálida. Esta es adecuada utilizarla como luz general. En cambio, para la zona del lavabo donde habitualmente lo utilizamos para afeitarnos o maquillarnos, es aconsejable elegir una luz neutra, ya que es algo más blanca.
¿Necesitas más información para la reforma de tu baño? Contacta con nosotros 946 124 801.